About Me

header ads

Diez de mayo


Desde pequeño hasta ahora ya crecido,
cuántos cambios en mi vida han ocurrido,
la madurez ha llegado, me había convertido,
sin embargo, mi alma buscaba con gran ahínco;
y en un memorable día, te encontré amor mío.

Fue un diez de mayo en donde aquel niño resurgía,
Aquella mirada tuya, felizmente me envolvía,
Me conquistaban los deseos, tu rostro me seducía.
Poco a poco fui acercándome, mi cuerpo se estremecía.

Tu mano y la mía se sujetaban con audacia.
Tus ojos resplandecían, mi corazón resucitaba.
Lentamente fuimos desapareciendo aquella cruel distancia.
Nos besamos, mi amada. Volví a creer en la magia.

Desde entonces supe con una infinita gran certeza,
que en tus labios quiero -hasta que mi ser fallezca,
sea en la banquita, o en el puente, o en el Ipso, donde sea-
escribir, plasmar mis sentimientos, recitarte mil poemas.

Mi alma es solo tuya, mientras habitas siempre en mi mente,
Desde aquel diez de mayo mis fuerzas ya no temen.
La felicidad recurre mis venas, incluso allá tus besos se sienten.
No pararé decirte nunca, amor mío, que mi corazón te pertenece.

Publicar un comentario

0 Comentarios